La importancia de cambiar el nombre de Fort Bragg a Fort Liberty es parte del ritualismo que han preparado.

«Dentro de la inquietante base del ejército de EE. UU. donde la gente desaparece y los asesinatos, suicidios y consumo de drogas son rampantes«.

Tte. Coronel Michael A. Aquino.

Michael A. Aquino fue un oficial, uno de los introductores e instructores del satanismo en el ejército USA y organizadores de GLADIO en Europa para la realización de atentados en suelo europeo, especialmente en Italia y España. También trabajó para Merrill Lynch en la bolsa de Nueva York.

Aquino ha introducido en los cuarteles norteamericanos y en bases en Europa el control mental de soldados mediante los conocimientos MK Ultra y proyecto Monarca. Ha dejado la herencia del uso fraudulento de la bomba atómica para impulsar la guerra y destruir países y continentes.

Los inmolaciones contra Donald Trump en estas semanas con proyectos ritualistas de la herencia e instrucciones de Aquino.

«Una bomba nuclear de EEUU casi explotó sobre Carolina del Norte en 1961«.

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Carolina del Norte alberga uno de los mayores arsenales de armas nucleares. Los atentados a Donald Trump han crecido en Fort Liberty. Es la herencia a lo que puede ser un autoatentado de falsa bandera en los EEUU.

De Carolina ha partido el misterioso buque de guerra de transporte USS Cape Texas preparando dispositivos submarinos en Gran Canaria y en el Canal de la Mancha, con activación cuando lo deseen.

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Tanto Livelsberger como Jabbar pasaron tiempo en la base anteriormente conocida como Fort Bragg, una enorme base del ejército en Carolina del Norte que alberga múltiples unidades de operaciones especiales del Ejército. Sin embargo, uno de los funcionarios que habló con la AP dijo que no hay coincidencia en sus asignaciones en la base, ahora llamada Fort Liberty.

Los resultados de los experimentos MK Ultra en Fort Liberty: «El veterano del ejército estadounidense Shamsud-Din Jabbar (izquierda) atropelló con su camioneta a una multitud en la calle Bourbon de Nueva Orleans. Matthew Livelsberger (derecha) alquiló un Cybertruck, lo llenó de explosivos y lo detonó frente al hotel de Las Vegas el 1 de enero «.

EEUU se ha dejado penetrar por el satanismo, la pedofilia, y los rituales satánicos en la misma médula del ejército y los supuestos custodios de las armas nucleares que las utilizarán en el mandato de Donald Trump si el Presidente no toma medidas durísimas.

Trump prepara la pena de muerte para los miles y miles de pedófilos. Quizás debiera comenzar por Fort Liberty del que es muy consciente de las prácticas satanistas de la base preferida por los Clinton, Obama, y Joe Biden.

Desde hace 20 años se trasladaron los rituales desde el tranquilo pueblo costero salmonero a adentro de la base.

eladiofernandez